14 de agosto de 2009

Sin que nada importara



Te solías quedar

esperandome en cualquier lugar
a la vuelta o a la ida
sin que nada importara
sin medir
sin ver
solo lo sentías

Me solías decir
que se yo qué cualquier pavada
aunque no dijeras nada
sin que nada importara
sin pensar
sin filtrar
solo lo pedías

Me solías mirar
como buscando cualquier cosa
aunque solo me miraras
sin que nada importara
sin decidir
sin querer
solo te rendías

Me solías amar
no sabiendo que inventar
proyectando algun delirio
sin que nada importara
sin saber
sin servir de nada
solo me querías




1 comentario:

Anónimo dijo...

Tu poesía me recuerda a sentimientos que tuve alguna vez... que mutaron y que estoy esperando a que muten nuevamente.

Y si me das a elegir, prefiero las cosas sin pensar, aunque a veces es difícil...

El amor te hace hacer eso, es como una especie de impulso donde "todo vale ¡vamos! se trata del amor"